Alimento fresco para conejos
Las plantas frescas aportan hidratación, vitaminas, minerales y otros nutrientes. Pero, sobre todo, aportan variedad a la dieta de nuestros conejos. Los conejos pueden comer una variedad extensa de plantas cultivadas y silvestres. Conocerlas es muy útil para hacer que la comida de nuestros conejos sea más sana y divertida.
La ingesta de plantas frescas, es decir, no secas, aporta algunos nutrientes que las plantas secas pueden no tener o tener en cantidades diferentes. Pero, sobre todo, aporta agua. La ingesta de gran cantidad de agua, ya sea directa o indirectamente, implica que el volumen de orina que un conejo produce sea más alto. Cuanta más cantidad de orina, menos problemas derivados de la acumulación de minerales en el aparato urinario se producirán. Por tanto, alimentar a los conejos con una buena parte de su dieta en forma de plantas frescas es una manera de prevenir y solucionar algunos problemas de piedras y residuos en riñones y vejiga. La orina en cantidad actúa a modo de arrastre ayudando a los sedimentos minerales a ser expulsados. No obstante hay que ser conscientes de los problemas de piedras y residuos en el aparato urinario de los conejos suelen estar relacionados con el metabolismo, no tanto con la alimentación. Pero la alimentación puede influir positiva o negativamente en estos problemas.
¿Qué plantas pueden comer los conejos?
Los conejos pueden comer muchas partes de las plantas, sin embargo, las que principalmente deben formar su dieta son las hojas. Por eso solemos decir que los conejos son folívoros, es decir, comedores de hojas. A parte de las hojas pueden comer ramas, flores, frutos, semillas, raíces, etc. Por supuesto no todas plantas son aptas ni todas las partes de cada planta. Por tanto, antes de ofrecer una planta a nuestro conejo debemos asegurarnos de que no le va a hacer daño.
La variedad de plantas diferentes que puede comer un conejo es increíble. Resulta triste que la mayoría, con suerte, coman bolsas de ensaladas del supermercado que contienen unas pocas plantas distintas. En general esto suele deberse a la comodidad y al miedo de muchas personas a darles algo peligroso por desconocimiento.
Por eso, conocer las plantas aptas para conejos es importante.
Podemos conseguir alimento fresco en forma de verdura comprada o cultivada por nosotros, plantas silvestres recogidas, plantas de jardín, plantas de interior, etc.
Lotus corniculatus
Las plantas silvestres de la zona mediterránea son el alimento natural del conejo en su origen. Por tanto, en este grupo de plantas hay muchas aptas para conejos. Cuanto más alejadas de este origen sean las plantas, más probable es encontrar plantas no aptas. Por ejemplo, las plantas de interior, que suelen ser plantas tropicales, no suelen ser las más adecuadas para conejos.
No podemos mencionar todas las plantas aptas y no aptas para conejos porque son infinidad. Pero, al menos, podemos aprender unas nociones básicas que nos permitan ampliar mucho la variedad de la dieta.
Plantas comestibles, venenosas, medicinales…
Cada planta contiene muchas sustancias. A parte de los nutrientes básicos como las proteínas, hidratos de carbono, grasas, vitaminas, minerales también contienen otras sustancias llamadas compuestos secundarios o metabolitos secundarios. Son sustancias que no son esenciales para el funcionamiento de la planta y que intervienen en la relación de la planta con su medio. Un ejemplo serían productos tóxicos que evitan que la planta sea comida por los animales. Por tanto, una planta puede ser apta o no apta, no solo por la cantidad de nutrientes que tenga y los posibles excesos, sino también por la presencia de compuestos tóxicos.
Al igual que la planta puede generar toxinas para defenderse de los animales, los animales evolucionan y se adaptan a esas toxinas, haciéndose inmunes. No todos los animales son sensibles a las mismas toxinas. Por esto hay mucha confusión con las plantas que pueden comer los conejos, muchas listas se elaboran en base a la toxicidad de las plantas para humanos o para otros animales de compañía.
En cuanto a las toxinas también debemos tener en cuenta que cualquier sustancia puede ser tóxica en las cantidades adecuadas. Por tanto, la presencia de una sustancia no es sinónimo de peligro a no ser que la cantidad sea suficiente para hacer daño. Es más, muchas sustancias que son tóxicas en una cierta cantidad, son medicinales en otra.
“Todas las sustancias son venenos, no existe ninguna que no lo sea. La dosis diferencia un veneno de un remedio”
A las plantas que contienen sustancias que en ciertas cantidades actúan como remedio, las consideramos plantas medicinales. A las plantas que pueden comerse en cantidad sin ser peligrosas las consideramos plantas aptas. Y a las plantas que presentan peligro en cantidades relativamente pequeñas las consideramos plantas venenosas. Pero, como hemos visto, estas diferencias no son tan claras como nos gustaría. La toxicidad es un tema complicado.
¿Saben los conejos qué plantas pueden comer?
La respuesta es: depende. Un conejo aprende de sus semejantes qué plantas debe comer. Primeramente de la madre. Las sustancias de las plantas que la madre ingiere llegan a los gazapos a través de la leche y estos aprenden a identificar su sabor. También imitan a otros conejos y comen lo que ven que otros comen. Pero esto ocurre en conejos en libertad. Los conejos criados en cautividad carecen de este aprendizaje y pueden cometer errores. Las sustancias tóxicas suelen tener un sabor no muy agradable, por tanto, en muchas ocasiones, los conejos no las comerán. Pero esto solo suele funcionar en conejos con acceso a muchas plantas diferentes. Cuando tienen dónde elegir, prefieren comer plantas de mejor sabor, pero cuando no tienen mucha variedad a su alcance, pueden acabar comiendo algo que no deben.
Los conejos en la naturaleza, también ingieren plantas medicinales cuando las necesitan y en las cantidades adecuadas. Cosa que no ocurre con los conejos en cautividad.
Por tanto, no debemos confiar en que los conejos puedan distinguir qué plantas pueden o no pueden comer. Nosotros seremos los responsables de controlar las cantidades y tipos de plantas que están a su alcance.
Como ayuda tenemos una lista en la que consultar si tienes dudas sobre una planta concreta. Consulta la lista aquí.
Preparando la mezcla
Hay muchas preguntas sobre las cantidades y la frecuencia con que se puede dar esta u otra planta. Se han elaborado infinidad de listas, tablas y carteles, la mayoría llenos de errores. Creo que es mucho más sencillo tener unas nociones básicas y aplicarlas siempre. La principal regla es “La variedad es más importante que la cantidad“. Independientemente de la cantidad de alimento fresco que demos a los conejos, si esa cantidad incluye 3 plantas, siempre es más probable que haya algún exceso o alguna carencia que si incluye 20 plantas distintas. Por tanto, aplicaremos un principio básico que ya usamos en nuestra propia dieta humana: La variedad es fundamental. Para los amantes de los números y cantidades podríamos decir que cada día se deben dar un mínimo de 6 plantas diferentes (mejor si son 15) y a la semana 10 diferentes (mejor si son 20). A ser posible de familias diferentes para que sean variadas nutricionalmente.
Reglas básicas para preparar la mezcla:
Usar mucha variedad de plantas diferentes.
No usar plantas consideradas tóxicas, venenosas o no aptas.
Usar en muy pequeñas cantidades plantas consideradas medicinales.
La base debe ser de plantas aptas pero ninguna en gran cantidad.
Consúltanos cualquier duda que te haya quedado después de leer este artículo.