Conejos en casa

View Original

Quiero un conejo

¿Cuándo y por qué llegamos a esa conclusión?

Cada historia es diferente. Pero quizás, antes de llevarlo a casa merezca la pena pensarlo bien. Antes de seguir adelante analicemos lo que implica.

¿Es una buena idea? Lo primero es informarse bien, para tomar lo que se suele llamar una decisión informada.  Una vez tengamos todos los datos, nos podemos lanzar… o no. Hay muchas cosas a tener en cuenta, especialmente si nunca hemos tenido conejos o si fue hace mucho tiempo.

 

Los conejos son animales con unas necesidades específicas que debemos tener en cuenta. Si no podemos cubrir una serie de necesidades básicas y no podemos comprometernos de por vida con su bienestar, lo más ético y responsable es no llevarlos a casa.

Nunca solo un conejo

El título de este texto es, para empezar, un error. No se debe tener un conejo solo. Los conejos son animales gregarios y una de sus necesidades básicas es vivir con otros conejos. Lo ideal son grupos, pero lo mínimo es una pareja. No, los cobayas, perros, gatos o humanos no valen como sustituto. Los conejos deben vivir con conejos. ¿Es esto una ventaja o un inconveniente? La respuesta solo la tienes tú.

Esperanza de vida

Los conejos pueden vivir más de 10 años. Llevar conejos a casa implica un compromiso a largo plazo. Los niños crecen, las familias cambian, puede haber mudanzas o cambios de vida. Pero un animal depende de nosotros para todo. El pequeño gazapito precioso crecerá en pocas semanas y se convertirá en un señor conejo. Debemos contar con que nos acompañará un largo tiempo. Es un proyecto que cambiará nuestra casa, nuestra planificación de vacaciones, afectará a la economía, nos dará trabajo y preocupaciones. Cada cual debe valorar si le merece la pena.

Necesitan espacio, tiempo, atención y paciencia.

Al contrario de  lo que la gente pueda pensar los conejos no son animales sencillos. Necesitan espacio, lo más adecuado es tenerlos sueltos por la casa, lo que implica tener que hacer algunas adaptaciones. Y quizás también algunas concesiones. Quizás a tu conejo no le gusten las patas de tus sillas y decida darles otro aire. ¿Te dará la risa o te desmayarás directamente?. Y si orina en tu alfombra favorita ¿cómo te lo tomarías?

No hay que sacarlos a pasear, pero su alimentación, su higiene y su salud necesitan tiempo y dedicación. Es importante conocer sus costumbres para detectar cambios en su comportamiento que puedan indicar problemas de salud. Cada día debemos dedicarles un tiempo para comprobar que todo está en orden. Si no tienes ganas de complicarte la vida, los conejos quizás no son la elección más adecuada.

Son animales caros de mantener

Aunque la mayoría de las cosas que venden para conejos son prescindibles, inútiles o incluso inadecuadas, los conejos pueden generar muchos gastos. Una alimentación adecuada basada en plantas frescas puede resultar cara. Necesitan un veterinario especialista en animales exóticos y no es infrecuente que haya que acudir de urgencia. Además hay que esterilizarlos por salud y por su bienestar, deben vacunarse y son propensos a enfermar. La factura sube. Mira bien si lo puedes asumir, conviene tener un colchoncito.

 No son adecuados para niños.

Muchos padres quieren llevar conejos a casa para sus hijos. Siento decir que esto es un error de base. Los adultos de la casa deben ser quienes quieran tener conejos, puesto que ellos serán los responsables durante años. Los conejos no son juguetes. Aunque pueden vivir en casas donde haya niños, los niños deben aprender a respetarlos. No todos los niños son capaces de reprimir sus ganas de cogerlos en brazos o manipularlos, cosa que los conejos no llevan bien. Los  niños pueden terminar frustrados o, peor, terminar provocando un accidente o una respuesta agresiva del conejo.

Y, por supuesto, los conejos no son un programa de aprendizaje sobre la responsabilidad. Los niños nunca pueden ser los responsables de un animal, esa es una responsabilidad que les viene muy grande. Quizás una planta, que no sufre si la cuidan mal, pudiera ser una opción más razonable. Crecer con animales es una opción enriquecedora para cualquier niño, pero debe ser siempre desde una tenencia responsable y una convivencia en el respeto. Conejos con niños: bien. Conejos para niños: mal.

Son inteligentes

Nos pondrán a prueba con sus ocurrencias, pero también nos sorprenderán aprendiendo rápidamente muchas cosas e incluso trucos si los adiestramos. Las dos caras de la misma moneda. Para bien o para mal son muy listos. Hay quien dice que ellos también nos adiestran a nosotros. No se por qué lo piensan (dijo ella mientras le daba un mordisco de su plátano a su conejo que la miraba con ojos penosos).

Son divertidos

Los conejos no son aburridos como mucha gente cree. Ese mito viene provocado por la mala costumbre de encerrarlos en jaulas, en las cuales no tienen posibilidad de realizar muchos comportamientos, ni apenas moverse. Cuando tienen libertad se integran perfectamente en la vida familiar, desarrollan sus costumbres, interaccionan con los humanos y nos sorprenden con sus trastadas. Si tus conejos andan sueltos por casa, el entretenimiento está asegurado, especialmente a ciertas horas de la mañana y la tarde que es cuando pasan del estado “stand by“ a “on“.

Peligro de adicción

Al igual que los conejos no son para todo el mundo. también es verdad que pueden llegar a generar verdadera devoción. Quizás adicción es una palabra algo exagerada, pero mucha gente, después de tener conejos en casa ya no sabe vivir sin ellos. Es un cambio en el estilo de vida, como lo es tener perros, niños, pareja. Y a veces, los estilos de vida son difíciles de abandonar. Además, por más que los esterilices, hay casas en las que cada vez hay más conejos. Empezaron con uno y luego la cosa se fue liando. Total, donde comen dos, comen siete.

Resumiendo

Si no sabes si tener conejos es para tí o no, esta web quizás pueda ayudarte con la decisión. También es útil conocer experiencias de la gente que los tiene. En nuestro grupo de Facebook hay mucha gente compartiendo dudas, vivencias, pensamientos y lo que viene a ser el día a día con conejos. Visitanos y participa en “Conejos y roedores en casa“. La experiencia de otros nos puede ahorrar muchos errores y cavilaciones.